La concejala socialista Loles Fernández reclamó ayer que la Gerencia de Urbanismo revise el permiso de obra menor del Casino del Puerto y ordene una nueva inspección para determinar si el luminoso de la fachada cumple con la licencia que se le otorgó. La edil planteó esta reclamación tras conocer que fuentes técnicas de toda solvencia aseguran que la estructura situada en el frontal del inmueble no se puede considerar una "marquesina", que es para lo que se dio licencia, sino que atiende más a la calificación de "muestra", en cuyo caso excede las medidas reglamentarias.

Fernández apuntó que, cuando se empezó a instalar el luminoso "estuve mirando el expediente y hablando con los técnicos y ya pedí que se revisara la licencia".

Además, recuerda que "las primeras declaraciones de la concejala de Imagen Urbana fueron para decir que no le gustaba". Entonces, indicó, "yo le recordé que en el Consejo de Gerencia están las comisiones de Estética, que deberían realizar un seguimiento de las licencias que se conceden en lo que respecta a las fachadas, sobre todo en determinados edificios". La edil socialista opina que Oti García-Pertusa "tiene mucho que decir y debería ya aclarar si sus competencias son para algo más que plantar flores".

Fernández reclama que, cuando se pida una licencia, "el Ayuntamiento sepa cómo va a quedar la fachada, aunque sea presentando una imagen puntual".

Al ser preguntada por el Casino, Oti García-Pertusa sólo respondió que "se está viendo el tema", sin aclarar qué gestiones ha realizado con la Autoridad Portuaria o con la propiedad del Casino para retirar el luminoso, tal y como anunció que iba a hacer.

Por su parte, el gerente de Urbanismo, Enrique Sanus, opinó que la diferencia entre una marquesina y una muestra es difícil de establecer y aseguró que, en contra de la opinión técnica consultada por este diario, la fachada "concuerda con el proyecto de obra menor que se le concedió".

"Nosotros consideramos que lo que se ha hecho es legal" y aseguró que "un técnico lo revisó y dijo que sí concuerda".

No obstante, Sanus no cerró del todo la posibilidad de encargar una nueva inspección dado el rechazo social que ha despertado esta estructura luminosas que llama tanto la atención en el Puerto de Alicante.