La mercantil francesa registró la marca "Buda/Buddha Bar" en el año 1998 y presentó la demanda contra las empresas españolas después de que este tipo de locales empezaran a proliferar en distintas partes del país. Seguidos de la apostilla, "del mar" o "Sevilla" y "del Sol", los Buddha empezaron a abrir en Madrid, Sevilla y Marbella alcanzando gran notoriedad nacional. De hecho, es uno de los locales que utiliza el Real Madrid para celebrar sus fiestas. La demanda no sólo incluye la indemnización y el cambio de nombre, sino la clausura de todas las páginas web o los gráficos y signos que imitan a los locales de la mercantil francesa. El magistrado ha llegado a la conclusión de que existe un riesgo de confusión para el consumidor, ya que el público puede pensar que todos los productos o servicios que se ofertan pertenecen a la misma empresa. Los demandantes consideraban que la empresa española había registrado la marca "Buddha del mar", que es la que ahora se anula, para aprovecharse de su prestigio.