Los vascos los que cuentan con menos días festivos y los asturianos y valencianos los que disfrutarán de más días sin colegio, según datos recabados por Europa Press. Así, los estudiantes del País Vasco no irán a clase durante cinco días, frente a los doce de Asturias y Valencia.

En el resto de comunidades autónomas, las vacaciones duran desde los siete de Canarias hasta los once de Baleares, Cantabria, Madrid, Navarra y La Rioja. En unas cifras intermedias se sitúan Aragón, Castilla-La Mancha, Galicia y Murcia, con ocho días sin colegio; Andalucía, con nueve, y Castilla y León, Cataluña, Ceuta, Extremadura y Melilla, con diez.

Concretamente, en Andalucía las vacaciones van del 31 de marzo al 8 de abril; en Aragón, del 2 al 9 de abril; en Asturias, del 30 de marzo al 9 de abril; en Baleares, del 5 al 15 de abril; en Canarias, del 2 al 8 de abril; en Cantabria, del 5 al 15 de abril; en Castilla-La Mancha, del 2 al 9 de abril; Castilla y León, del 30 de marzo al 8 de abril, y Cataluña, del 31 de marzo al 9 de abril.

Los alumnos ceutíes y extremeños comenzarán sus vacaciones el 31 de marzo y las terminarán el 9 de abril, mientras los gallegos dejarán de ir a clase el 2 de abril, hasta el 9. Del 30 de marzo al 9 de abril durarán las de los madrileños; del 31 de marzo al 9 de abril, las de los melillenses; del 2 al 9 de abril, las de los murcianos; del 5 al 15 de abril, las de los navarros; del 5 al 9 de abril, las de los vascos; del 5 al 15 de abril, la de los riojanos, y del 5 al 16 de abril, las de los valencianos.

LOS PADRES VEN BIEN LA DURACIÓN DE ESTAS VACACIONES.

Para los padres de la Confederación Nacional Católica de Asociaciones de Padres de Alumnos (CONCAPA);, las vacaciones de Semana Santa están "bien" porque, además, coinciden con la tradición "religiosa y cultural" pero exponen el problema de la conciliación del horario escolar con el de los trabajos de los progenitores.

Así, el presidente de CONCAPA, Luis Carbonel, aboga por articular medios para que los niños estén "debidamente atendidos" cuando los días sin clase coinciden con los que los padres tienen que trabajar. Según explicó a Europa Press, sería conveniente estructurar actividades extraescolares en los centros educativos.

No obstante, reconoce que la problemática se acentúa en las "tremendamente largas" vacaciones de verano, que --a su juicio-- deberían reducirse y aumentarse las de Semana Santa con el fin de que sea una "buena ocasión" para que estudiantes y profesores puedan descansar para comenzar el próximo trimestre.

Por su parte, la Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA); considera "bastante bien" este "parón" de las clases para que los alumnos puedan "desahogarse" y "cambiar el chip" para afrontar el tercero y último trimestre con "aire fresco". En su opinión, estos días vacacionales han de servir para desconectar porque "ya tienen bastante carga lectiva desde enero".

No obstante, la presidenta de esta organización de padres laica, Lola Abelló, lamentó que estas vacaciones vayan ligadas a las fiestas religiosas, reclamando un cambio en este sentido. Además, dijo a Europa Press que estos días sin clase no deben extenderse demasiado por la dificultad de conciliarlos con los horarios laborales de los padres.