Más de 300 escolares de Primaria y Secundaria de Banyeres participaron ayer en la campaña de reforestación que la Generalitat está llevando a cabo en la partida de la Rambla, afectada por el gran incendio del verano de 1994. La actividad sirvió también para celebrar el Día del Árbol, y contó con la asistencia del conseller de Medio Ambiente, José Ramón García Antón, junto al primer edil del municipio, Antonio Belda, y alcaldes de poblaciones cercanas.

Los técnicos explicaron que la reforestación se está llevando a cabo sobre una superficie de 1 hectárea, en una zona situada a unos cinco kilómetros al noroeste de Banyeres. Hasta este lugar también llegaron las llamas que hace casi 14 años devastaron parte de la Sierra de Mariola y que cercaron tanto a Banyeres como a Bocairent y a otras localidades próximas. La Conselleria repartió unos 2.000 plantones entre los escolares, todos ellos de especies autóctonas, como pino carrasco y piñonero, carrasca, madroño y nogal.

García Antón destacó la "importancia" de la celebración del Día del Árbol, dado que supone un inicio en la "concienciación" de la persona hacia el medio ambiente. Así, consideró que el hecho de que el niño tenga contacto con el árbol es una forma de hacerle llegar la "trascendencia" que tiene el respeto por el patrimonio natural, y que encamine en este sentido sus conductas a medidas que vaya creciendo. Al mismo tiempo, hizo hincapié en que la vegetación es "un sumidero de dióxido de carbono", y que en zonas castigadas por el fuego como la que era objeto de reforestación ayer esta actividad tiene aún más sentido. El conseller colaboró con la iniciativa plantando también un árbol, al igual que el alcalde, que tuvo que repetir la acción más de una vez, ante la expectación que causó su presencia y la de los medios de comunicación para la mayoría de los escolares presentes.

Cinco millones

García Antón destacó que este año se replantarán cinco millones de árboles en la Comunidad.