La familia de Víctor Parada, el joven condenado a muerte en Malasia por introducir 450 gramos de cocaína en el país asiático y exvecino de Benilloba, se ha reunido con la directora ejecutiva de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte, Asunta Vivó, y con el director general del Ministerio de Asuntos Exteriores en Madrid. El encuentro lo organizó la senadora alcoyana adscrita a Podemos, Vicenta Jiménez, quien se ha implicado mucho en el caso, acompañando, incluso, a las dos hermanas de Parada, Yoli y Laura, a la capital española.

A su vuelta, Yoli ha manifestado que «han mostrado mucho interés en conocer el caso y nos han pedido toda la documentación». Aunque la reunión fue puramente informativa, la hermana de Víctor Parada ha añadido «tenemos esperanza en que todo salga bien», ya que Asunta Vivó les transmitió que están luchando por la abolición de la pena de muerte en muchos países y «lo han conseguido en muchos sitios».

«Ahora vamos a preparar todos los papeles que nos han pedido y después tendremos que volver a reunirnos con ellos». De forma paralela, el gobierno de Bolivia volverá a enviar a un representante a Malasia a finales de septiembre o principios de octubre para «visitar a mi hermano e interesarse por su situación. También nos han dicho que está previsto que mi madre viaje con él para intentar verlo».