Artesanía, gastronomía, turismo, cultura, espectáculos y diversión visten las calles de Castalla durante este fin de semana. Multitud de vecinos y visitantes disfrutan de este tradicional certamen que llega este año a la XXVI edición . En total, 70.000 metros de exposición y más de 250 expositores dan forma al programa de actividades de la Feria de San Isidro. Una cita que reúne en las céntricas calles del municipio de La Foia a multitud de vecinos y visitantes de toda la provincia.

La feria cobraba vida el pasado viernes, en una jornada que registró cifras de asistencia masivas e inesperadas según declaraba a este diario la edil de Fiestas, Isa Verdú. Resaltaba que «no esperábamos que en un día laborable acudiera tanta gente a ver el pistoletazo de salida de la feria. Estamos convencidos que durante el fin de semana la asistencia superará con creces las previsiones, ya que el tiempo también nos va a acompañar».

Durante la mañana de ayer, la corporación municipal de Castalla, alcaldes y ediles de los municipios de la comarca inauguraron oficialmente el certamen y recorrieron todas las áreas de la feria. Trasladaron a los expositores su agradecimiento y comprobaron de primera mano cada uno de los oficios de artesanía que se llevan a cabo en el mercado medieval.

En el área de gastronomía, situada en los alrededores de la plaza del ayuntamiento se congregó cantidad de público en los horarios de comida. Los visitantes reponían fuerzas en un recinto gastronómico que ofrecía variedad alimenticia y comida de todos los puntos del mundo. También pudieron disfrutar de distintos stands turísticos de varios municipios de la comarca así como disintas asociaciones culturales y benéficas.

Una colorida villa medieval

El mercado medieval, concentró el mayor número de visitantes durante todas las jornadas. La diversidad de oficios, artesanía, plantas, remedios medicinales y espectáculos del medievo conforman la gran villa medieval.

Además de los puestos de artesanía, los espectáculos de danza, luchas templarias, música étnica y exhibiciones animales divirtieron a todo el público asistente. Otra de las áreas destacadas y consolidadas en el certamen fue la zona tecnológica, un espacio en el que participa el Campus de Alcoy de la Universitat Politècnica de València (UPV) así como otros centros educacitvos de la comarca. La zona de automoción y vehículos también concentró a cantidad de curiosos que buscan en la exposición las novedades del sector así como las diversas ofertas que los feriantes ofrecen durante estos días.

Una feria que se declara como una cita provincial que año tras año crece y suma grandes cifras.