La Diana abrió ayer las Fiestas de Moros y Cristianos de Alcoy. Numeroso público se congregó en la plaza de España para arropar a los festeros de las 28 filaes en el desfile que da paso a tres intensas jornadas. En esta ocasión, los Maseros celebraron su 175 aniversario con la primera escuadra femenina.

Poco antes de las seis de la mañana el sargento cristiano, Javier Lerma, arrancaba la Diana dirigiendo la Filà Navarros, la cual ostenta la capitanía. El tradicional acto supone cada año el pistoletazo de salida de la Trilogía alcoyana y se caracteriza por el desfile de las 28 filaes a ritmo de pasodoble.

Tal y como viene siendo habitual desde que los Marrakesch hiciesen historia hace tres años con la primera escuadra femenina, cinco formaciones de mujeres -Maseros , Marrakesch, Alcodianos, Realistas y Chanos- participaron en la Diana, destacando la de los Maseros, al ser la primera y coincidir con el 175 aniversario de la filà.

El primer tramo del desfile, el que empieza en la puerta del Ayuntamiento y finaliza en la calle San Jorge, fue el que más público congregó. Todos los presentes se deshicieron en aplausos al paso de las 28 escuadras.

En el bando moro, el sargento, Daniel Méndez, se despidió del cargo que ha ostentado durante cuatro años arrancando por última vez la Diana junto a la Filà Verdes, la del capitán.

Un año más, las últimas filaes que desfilaron por el tercer tramo -desde el Partidor hasta la plaza de España- se toparon de cara con una multitud de personas que ascendían en sentido contrario para buscar y ocupar sus sillas, desluciendo el final del desfile.