Las danzas populares de Navarra llegaron ayer a Alcoy de la mano de la capitanía cristiana, protagonizada estas Fiestas de Moros y Cristianos por la Filà Navarros. Ocho parejas del grupo Muthiko Alaiak interpretaron bailes tradicionales en la plaza de España ante un nutrido público, ofreciendo un anticipo de lo que hoy se podrá ver en el boato del cargo festero en el inicio de la Entrada.
Desde hace 75 años, el grupo de danzas Muthiko Alaiak se encarga de investigar, conservar y difundir el folklore navarro, tanto en la recuperación de los bailes populares, como en la confección del vestuario.
Con motivo de la capitanía de la Filà Navarros, la entidad festera ha traído a la ciudad a este grupo de bailarines para que forme parte del boato que desfilará hoy en el inicio de la Entrada Cristiana. A modo de anticipo, el colectivo protagonizó ayer una espectacular demostración en la plaza de España.
El novedoso acto tuvo lugar en torno a las cinco y media de la tarde y contó con un nutrido público que contempló con asombro las pericias de los bailarines.
Ocho parejas, formadas por un chico y una chica cada una, salieron del interior del Ayuntamiento y cruzaron al centro de la bandeja de la plaza, donde iniciaron las danzas. Al finalizar la música, el público asistente se deshizo en aplausos, pero, aunque el grupo abandonó rápidamente el lugar, apenas unos minutos después volvieron a aparecer, en este caso sólo las chicas.
Con un atuendo totalmente renovado y con unas bandejas de mimbre en las manos, las jóvenes sorprendieron de nuevo con un baile muy diferente al anterior. Pero ahí no acabó el espectáculo, ya que, sin apenas descanso, irrumpieron los chicos del grupo vestidos de blanco con cintas de llamativos colores.
Para cerrar el acto, las ocho parejas volvieron a protagonizar juntos otra demostración, recibiendo multitud de aplausos. Todos los integrantes del grupo, incluidos los músicos, se realizaron una fotografía delante del castillo de Fiestas.
La actuación del grupo Muthiko Alaiak antes del inicio de la Fiesta del Pasodoble supuso un anticipo de lo que el público podrá contemplar hoy en la capitanía cristiana de los Navarros.
