El porcentaje de ocupación baja hasta el 50% en los establecimientos del interior de la provincia situados en ámbitos urbanos, pese a estar justo al lado de las montañas y contar también con importantes alicientes.

Este es el caso de Alcoy, ciudad donde, según la vicepresidenta de la Asociación de Turismo Alicante Interior, Indira Amaya, «tanto hoteles como restaurantes están haciendo un gran esfuerzo por mejorar e incrementar la oferta, y ahora mismo se trata de un destino sumamente atractivo».

Amaya señaló que durante un tiempo se ha estado pagando la escasez de oferta que existía, «pero la cosa ha cambiado de manera radical. El visitante tiene en estos momentos múltiples posibilidades tanto para dormir como para comer, además de posibilidades culturales y patrimoniales, a las que se añade el encato de los numerosos parajes naturales de la zona».