El pleno del Ayuntamiento de Alcoy ha aprobado por unanimidad una declaración firmada por todos los partidos de la corporación municipal en la que se pide al Gobierno de España que continúe con las gestiones para preocuparse por la situación de Víctor Parada, condenado a muerte en Malasia por introducir presuntamente droga en este país.

Víctor Parada, como ha venido informando este diario, es ciudadano boliviano y residió durante años en Benilloba pero su familia reside en Alcoy. Sin entrar a valorar la situación judicial o los hechos que se han juzgado, los grupos municipales han querido mostrar su repulsa a la pena de muerte en todo el mundo. Por lo tanto, los partidos que forman parte de la corporación piden que se interceda para que no se aplique la pena capital a un ser humano.

La declaración que se ha llevado a pleno dice, textualmente, que «el Ayuntamiento de Alcoy, reunido en pleno, pide a las instancias pertinentes del Gobierno de España, en base a nuestra preocupación por la situación de Víctor Parada, la familia del cual reside en nuestra ciudad y ha sido condenado a muerte en Malasia, y para dejar clara nuestra postura de repulsa frente a la pena de muerte en todo el mundo, que prosiga con las gestiones para instar al Gobierno de Bolivia a que realice todas las medidas y acciones necesarias ante el Gobierno de Malasia para evitar la ejecución de esta pena capital».

En la sesión plenaria han estado presentes las dos hermanas de Víctor Parada, que visiblemente emocionadas han agradecido con aplausos a los diferentes partidos políticos el respaldo prestado a su hermano. Como se recordará, la familia está realizando múltiples gestiones para evitar que se consume la condena, y en este sentido han presentado alegaciones para que se repita el juicio, al entender que no ha contado con las garantías exigidas. También el Gobierno de Bolivia se está interesando por la situación.

Esperan que la repercusión que está teniendo el caso en los distintos medios de comunicación internacionales también sirva de ayuda y que finalmente no se llegue a la aplicación de la pena capital.