El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana ha emitido una sentencia que obliga al Ayuntamiento de Castalla a suprimir la subida del 8% en los recibos del agua aprobada la anterior legislatura, y a liquidar los 900.000 euros pendientes de la construcción del nuevo depósito.

El fallo declara nulo el acuerdo plenario del 9 de mayo de 2014, cuando los concejales del PP y UCiD, más el edil no adscrito, aprobaron la construcción de un nuevo depósito de agua en la zona de la Espartosa por 1,2 millones de euros. Las obras fueron adjudicadas directamente a la empresa concesionaria del servicio, cuando se tendría que haber convocado un concurso público.

También se aprobó una subida del 8% en los recibos del agua potable para pagar el depósito, a lo cual llevan haciendo frente los vecinos desde hace dos años.

La sentencia obliga a suprimir dicha subida, con lo que el Ayuntamiento tendrá que hacerse cargo de los 900.000 euros que siguen pendientes de pago por la construcción del depósito.

El alcalde, Antonio Bernabeu, se ha mostrado muy crítico con los concejales que tomaron estos acuerdos, «a pesar de contar con informes en contra de los técnicos municipales advirtiendo que se tenían que licitar las obras».

Los servicios jurídicos del Ayuntamiento estudian en estos momentos cómo se cumple la sentencia, sobre todo en lo que respecta a los recibos que los vecinos ya han abonado con el incremento del 8%. En caso de constatarse un perjuicio económico para las arcas municipales, Bernabeu adelanta que se pedirían responsabilidades a los citados concejales, que «podrían haber incurrido en un delito de prevaricación».