La nieve regresó ayer a las montañas más altas de la provincia de Alicante, merced a un nuevo descenso de temperaturas que coincidió con un frente que trajo consigo precipitaciones más bien discretas. Las cimas de Aitana, la Serrella, la Font Roja y el Montcabrer se vistieron de un leve manto blanco, en un inicio de año que se está mostrando prolífico en este tipo de episodios meteorológicos.

La nieve se está convirtiendo en una visitante habitual de la provincia desde el inicio de 2018. Fue a principios de febrero cuando en una semana se registraron nada menos que cinco nevadas, la primera de las cuáles a cotas muy bajas con problemas para el tráfico, y las posteriores ya sólo en las montañas. Tras un pequeño paréntesis, el jueves de la semana pasada Aitana volvía a vestirse de blanco, y ayer otra vez en una nueva bajada de temperaturas que también llevó la nieve a lugares como Serrella, la Font Roja o el Montcabrer. Fueron, en todo caso, precipitaciones discretas, que sólo sirvieron parta dejar un ligero manto blanco en las partes más altas de las montañas.

Ferrocarril

La nieve provocó que un Avia que circulaba entre Santander y Alicante quedase detenido a la altura de Cuenca. Sus 130 pasajeros tuvieron que esperar un AVE que los trajo hasta la capital de la provincia con tres horas de retraso.