Más de setenta visitantes disfrutaron en la mañana de ayer de la flora y fauna de la Albufera de Gaianes. Una visita guiada mostró a los participantes las peculiaridades de este paisaje protegido. Los guías realizaron un recorrido que culminó con una observación de todas las aves que habitan en el espacio natural. Además, también pudieron conocer la historia de su formación y sus principales características geológicas.

La Albufera de Gaianes, paisaje protegido a los pies del Benicadell y ubicado en el paraje del Serpis, fue desecada en la época árabe y sus aguas se utilizaron para el regadío de cultivos mediante la creación de canales. Sin embargo, renació en el año 2004 después de un episodio de fuertes lluvias. Con un total 1,6 kilómetros de perímetro y una lámina de agua de once hectáreas, reúne una gran riqueza en flora y fauna. Fue declarado paisaje protegido en el año 2007 y desde entonces la Generalitat ha incidido en su recuperación y conservación. Su llenado se produce en la mayor parte por las aguas de lluvia. Por lo tanto, las beneficiosas condiciones climatológicas de este invierno han favorecido a su estado actual.

Los participantes en la actividad de ayer se concentraron a primera de la mañana en la entrada de Gaianes. Tras el almuerzo iniciaron la visita alrededor de toda la laguna y fueron escuchando las explicaciones sobre sus principales características. El punto clave de la actividad fue la observación de fauna en el mirador de telescopios. Los visitantes pudieron ver la variedad de las especies que habitan en la Albufera.

Entre las especies más abundantes destaca la foja común, especie que supera los 125 ejemplares en el período invernal. Esta ave se detiene en la laguna para reponer energía y aumentar el nivel de grasa de su cuerpo y así, seguir su viaje hacia el norte de Europa. También pudieron observar el calamón común, una especie en peligro de extinción de la cual hay tres parejas criando en el paraje. Uno de los guías de la visita destacaba que «la Albufera de Gaianes es un oasis para las aves». Hay otras especies como zampullín, somormujo, ánade real o gallineta común. En cuanto a la flora, destacan el carrizo y la enea.

El director conservador de los parques naturales de la Sierra de Mariola y la Font Roja, Salvador Palop, destacaba el éxito de la jornada e indicaba que su objetivo es divulgar los valores naturales.