El tirón de las dos últimas semanas ha permitido al juguete cerrar el año con con un incremento de las ventas cercano al 2%. El consumo en el mercado nacional se ha situación alrededor de los 1.200 milllones de euros pese al parón registrado en la actividad comercial entre octubre y noviembre. El sector ha expresado su satisfacción, aunque no haya alcanzado los resultados previstos inicialmente.
Se las prometía felices el sector juguetero este año, a raíz de los fuertes incrementos de ventas registrados en el mercado nacional hasta el verano. Las previsiones apuntaban a un crecimiento a final del ejercicio de entorno al 6%, lo que suponía volver a alcanzar las cifras anteriores a la crisis económica.
Sin embargo, y tal y como ya informó este diario, la llegada del mes de octubre supuso un punto de inflexión a la baja, que continuó también durante el mes de noviembre. Esta circunstancia, teniendo en cuenta que se acercaba además el período más decisivo para el sector, echó al traste las citadas previsiones, haciendo que incluso se llegara a temer por un descenso de las ventas.
Al final, con todo, la situación se ha reconducido, en la que ha sido una nueva demostración de la fuerte estacionalidad que afecta al juguete. Según los datos facilitados por la Asociación Española de Fabricantes, la actividad comercial fue especialmente intensa las dos semanas previas a las Navidades y los Reyes Magos, lo que propició que al final el consumo en el mercado nacional se situara en cerca de 1.200 millones de euros, lo que supone un 2% más que el ejercio anterior.
El presidente de la patronal juguetera, José Antonio Pastor, valoró como bueno el resultado final, después de los nubarrones que se oteaban en el horizonte. «Estamos de hablando en definitiva de un crecimiento, que además ha estado muy repartido, puesto que en esta campaña no ha habido productos especialmente estrella. El resultado es todavía mejor si se tiene en cuenta que el mercado español ha sido el único que ha crecido del conjunto de la Unión Europea, y que el incremento a nivel mundial ha sido sólo del 1%», enfatizó.
Cuestiones como la crisis catalana o el mal funcionamiento de la campaña del Black Friday se esconden detrás del bajón de ventas registrado en octubre y noviembre, que afortunadamente después se ha logrado remontar.
Uno de los problemas causados por el hecho de que no se hayan alcanzado las previsiones iniciales es la acumulación de stock en las tiendas, «lo que propiciará que a las empresas les cueste arrancar más el año», dijo Pastor.
Exportación
Como ya se informó, mientras las exportaciones jugueteras del sector nacional habían experimentado hasta el mes de noviembre un incremento del 14%, las de la provincia habían descendido un 2%. Pastor atribuyó este fenómeno «a operaciones que se habrán cerrado desde centros de producción que las empresas de la zona tienen en otros territorios, porque las impresiones que tenemos es que están contentas».
