La Junta de Fiestas de Muro apuesta por mantener la procesión de la «Baixà» antes del inicio de los Moros y Cristianos. La buena acogida del cambio, implantado a modo de prueba el año pasado, y el numeroso público que asistió ha llevado a los «caps de filà» a rechazar que vuelva a celebrarse tras la en Entrada Mora como sostiene la Cofradía de la Mare de Déu dels Desemparats.
El traslado de la procesión de la «Baixà» abrió el año pasado una brecha entre la Junta de Fiestas y la Cofradía, después de que la primera anunciase que por unanimidad había acordado adelantar el acto a las 12.30 horas del sábado 13 de mayo, en lugar de realizarlo al finalizar la Entrada Mora. La Cofradía se negó a sacar la imagen de la patrona fuera de su horario habitual, lo que obligó al Ayuntamiento a convocar hasta dos comisiones de conciliación.
Finalmente, sendas entidades acordaron adelantar la «Baixà» una semana, celebrándose antes del inicio de los días centrales de las Fiestas de Moros y Cristianos. No obstante, tanto la Junta como la Cofradía dejaron constancia por escrito que «este acuerdo no creará un precedente y, finalizadas las Fiestas de 2017, la comisión de conciliación se reunirá para estudiar y valorar el desarrollo de las mismas y las posibles propuestas de cara a 2018».
Si bien desde entonces han habido varias reuniones, no se ha conocido hasta ahora la postura de las entidades implicadas, las cuales vuelven a tener diferencias. La Cofradía, según ha podido saber este diario, quiere que la procesión vuelva a celebrarse tras la Entrada Mora, mientras que la Junta de Fiestas apuesta por mantener el cambio del año pasado.
Fuentes de la entidad festera aseguran que el traslado de la «Baixà» resultó positivo, dado que «se multiplicó el público» y, por tanto, «una cosa que funciona no hay por qué cambiarla». Asimismo, recalcan que «en Muro todos los actos festeros los organiza la Junta de Fiestas». Las fechas y los horarios todavía no han trascendido, dado que aún quedan reuniones pendientes.
