El Congreso de los Diputados ha acogido esta mañana la jornada parlamentaria “El diseño español en el siglo XXI: Retos y Estrategias”, en la que 200 profesionales del sector han analizado la situación actual del diseño y los desafíos a los que se enfrenta. Actiu, empresa alicantina fabricante de muebles de oficina y contract y reciente Premio Nacional de Diseño 2017, ha defendido el impacto positivo y diferenciador del diseño como motor de innovación, competitividad, rentabilidad y crecimiento para las empresas españolas.

Esta iniciativa histórica y de carácter informativo ha sido organizada por el Grupo Parlamentario Socialista en colaboración con RED, READ y otras entidades privadas y educativas para respaldar la presentación de una Proposición No de Ley que impulse el desarrollo de una Estrategia Nacional de Diseño, que se debatirá en la Comisión de Economía, Industria y Competitividad.

El programa se ha estructurado en torno a dos mesas redondas, una primera enfocada a los retos del diseño y la segunda, a las estrategias. En ambas ha participado una amplia representación de profesionales, empresas, asociaciones vinculados al diseño español. Destacar, entre los convocados a este acto, la importante muestra de diseñadores, empresas e instituciones valencianas que están trabajando el diseño como valor estratégico y que han intervenido en el debate parlamentario: los diseñadores Pepe Cosín, Vicent Martínez, Vicente Gallega, Nacho Lavernia, Soledat Berbegal, de la firma Actiu o la propia impulsora del Propuesta no de Ley, Ana Botella, diputada valenciana del grupo socialista.

Los ponentes del primer debate han puesto sobre la mesa los retos a los que se enfrenta el diseño español. Actiu, ha expuesto, a través de su directora de comunicación estratégica, Soledad Berbegal, como “el diseño es una experiencia transformadora; experiencia porque es una vivencia para las personas y transformadora porque cambia la sociedad. Entendemos el diseño como un todo, una estrategia de futuro para las empresas, la sociedad española y nuestro país”, ha dicho. Y ha añadido que “tal y como recoge la Propuesta no de Ley que se presenta hoy, es preciso establecer recursos que ayuden a identificar y medir el impacto del diseño en la economía de nuestro país. Solo así podremos saber la efectividad real de este recurso. Y no es nada que estemos inventando nosotros, muchos países de Europa y del mundo lo hacen, conscientes de la importancia del diseño”.

La jornada ha sido inaugurada por Rafael Simancas, Secretario General del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados, quien ha señalado la necesidad de poner “ el diseño en la agenda política del país desde esta casa, el Congreso de los Diputados”. La diputada socialista Ana Botella ha hecho la introducción señalando que “el diseño trasciende más allá de valores estéticos y culturales. Es un valor estratégico y económico, por eso lo impulsamos desde la Comisión Económica, conscientes de la transversalidad de esta disciplina”.

La Proposición No de Ley vinculada a esta jornada destaca la capacidad del Diseño para crear valor y contribuir a la competitividad, a la prosperidad y al bienestar en Europa. El Diseño para la Innovación, Design for innovation, ocupa un lugar destacado en la estrategia actual de crecimiento, mercado interior, industria, emprendimiento y PYME de la Comisión Europea. Hay un amplio consenso europeo en que la innovación impulsada por el diseño aumenta la eficiencia en los servicios públicos y potencia el crecimiento empresarial, tanto de las grandes empresas como del amplio tejido de pequeñas y medianas empresas europeas, que encuentran en el diseño una herramienta clave de competitividad e internacionalización.

En la misma línea ha intervenido Soledad Hernández, diseñadora y presidenta de DiMad, que ha señalado la falta de apoyo institucional al diseño “para constituir una verdadera fortaleza en nuestro tejido empresarial. El diseño español es una realidad exitosa pero no institucionalizada. No sabemos su peso específico, no tenemos idea de su valor dentro de la competitividad nacional económica. Hubo un tiempo en que había instituciones que se encargaban de estas tareas, pero la crisis y los recortes acabaron con todas ellas”. Vicent Martínez, diseñador industrial ha indicado que “el reto en la creatividad es encontrar el valor que aporte la diferenciación, la sostenibilidad para que sea duradero a largo plazo, para solucionar problemas y convertir una idea en un bien de consumo”. Carlos San José, director de proyectos de diseño de ADN Design, ha iniciado su intervención destacando que “ver a 200 personas en el Congreso de los Diputados hablando de Diseño es emocionante” además se ha mostrado esperanzado en que “esta jornada sirva de impulso para que el sector y el colectivo profesional podamos situarnos en una posición influyente que pueda cambiar el rumbo de determinadas estrategias de país”.

El diseñador Pepe Cosín, ha aportado su visión diciendo que “somos un país contradictorio, somos un país creativo, pero no nos lo creemos, o no sabemos valorarlo. La educación es clave”. El diseñador gráfico Emilio Gil, ha querido resaltar la necesidad de llegar a la sociedad y que ésta “sea consciente de cómo los diseñadores mejoran la sociedad. El diseño es transversal, ha de estar en todas las disciplinas”. Marcelo Leslabay, director editorial de la revista Experimenta, ha sido el moderador en el debate.

La segunda mesa, Estrategias, ha estado representada por el gerente de RED, Juan Mellén, el diseñador industrial y gráfico, Nacho Lavernia, la diseñadora y presidenta del FAD, Nani Marquina, la directora del Museo Nacional de Artes Decorativas, Sofía Rodríguez, el presidente de la Confederación de Escuelas de Artes Plásticas y Diseño (CEA), Eugenio Vega y el diseñador Anxo López. La moderación de la mesa redonda la ha realizado el presidente de la Red Española de Asociaciones de Diseño (READ), Vicente Gallega.

Por primera vez en la historia del Congreso de los Diputados se facilita un debate en el que todo un sector como el Diseño ha estado representado por profesionales, empresas, asociaciones y entidades educativas y donde se ha puesto encima de la mesa la necesidad de contemplar el diseño como un valor transversal para todos los sectores e implementarlo con una política de estado. Este ha sido el primer paso para trabajar conjuntamente, para poner en valor el talento y la creatividad del país aplicando el diseño. Ponerlo al servicio de la sociedad es conseguir mayor bienestar, mejores empresas y entornos más inteligentes.