Pasión por los pajes pajes de la Cabalgata de Reyes Magos de Alcoy. Eso es lo que se vive estos días en la ciudad, después de las acusaciones de racismo que han ido circulando por las redes sociales. Los ciudadanos se han volcado para apoyar una de las principales señas de identidad del desfile epifánico más antiguo de España, y una prueba de ello es que los balcones se han llenado de muñecos, al tiempo que se han disparado las ventas de productos relacionados con estos característicos personajes.

Tal y como se ha venido informando, la revista digital «Afroféminas» publicaba hace algunas semanas un artículo en que se definía a los pajes de la Cabalgata alcoyana como un «Black Face masivo» que, en su opinión, ofende y ridiculiza a las personas de raza negra. Estas aseveraciones encontraron el apoyo, además, de la diputada nacional de Podemos Rita Boshao.

Las reacciones no se hicieron esperar, y el pleno municipal aprobaba por unanimidad una moción institucional apoyando a los pajes pintados con betún y negando que se trate en ningún caso de racismo, toda vez que son los que llevan la magia y la ilusión a los niños.

Pero la reacción más llamativa ha sido la de los ciudadanos, dado que en apenas un dia se recogían 10.000 firmas a favor de los pajes, y ahora se están disparando las ventas de productos relacionados, hasta el punto de verse más muñecos que nunca por los balcones.

Mauro Solbes, de la tienda Monkeboys, señalaba ayer que «hay bastante más demanda de muñecos, camisetas y otros artículos, hasta el punto que el paje le está comiendo terreno a Tirisiti, que es el otro personaje singular de la Navidad alcoyana. La gente quiere reivindicar, pero siempre desde el buen humor, sin ningún tipo de enfado ni mal rollo».

Rosa Vila, de Capitoné, destacaba que «la venta de muñecos es similar, pero sí es cierto que hay más demanda de otros artículos como tazas, chapas, pins o pegatinas. Y además por parte de la gente de Alcoy, que quiere defender la figura del paje».