La construcción de 208 nichos para cubrir las necesidades de enterramientos ha dejado al cementerio de Alcoy prácticamente al límite de su capacidad, toda vez que apenas queda espacio para habilitar nuevas sepulturas. El Ayuntamiento tiene previsto estudiar nuevas fórmulas de gestión para no tener que recurrir constantemente a ampliaciones del recinto.
El Consistorio está procediendo a la construcción de 208 nichos en el cementerio municipal, a través de una inversión de 66.900 euros. Esta actuación se suma a la llevada a cabo hace unos meses, cuando se habilitaron otros 80 nichos con un coste ligeramente superior a los 53.000 euros. Fue cuando se llegó a estar al borde de la saturación, a raíz de la gran cantidad de fallecimientos registrados en las últimas semanas de diciembre y las primeras de enero.
Según explicaba el concejal de Obras, Jordi Martínez, los nuevos nichos «van a dar un poco de margen» para atender las necesidades en enterramientos. «Cada vez se recurre más a la incineración, entre un 40% y un 50% de los casos, pero sigue habiendo demanda de nichos», enfatizó el edil.
Sea como fuere, estas últimas obras han dejado al cementerio prácticamente al límite de su capidad, dado que apenas queda espacio para construir nuevos nichos. Esta circunstancia es la que ha llevado al Ayuntamiento a plantarse la necesidad de estudiar nuevas fórmulas de gestión. Según Martínez, «queremos ver cómo lo hacen en otras ciudades, porque no podemos ir comprando continumente terrenos para ampliar el cementerio de manera indefinida. En algún momento tendremos que plantearnos otras soluciones, y eso es lo que hay que concretar».
