El Ayuntamiento de Alcoy ha desbloqueado el proyecto de reforma de la Rosaleda. La junta de gobierno ha rescindido el contrato con el autor del anterior diseño para poder redactar el nuevo y cumplir con las exigencias marcadas por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana. La propuesta está siendo negociada con el grupo ecologista La Carrasca y dejará la plaza totalmente plana sin afectar al parking subterráneo. El objetivo, según ha anunciado el alcalde, Antonio Francés, es ejecutar las obras el próximo año.

El Ayuntamiento ha dado un paso decisivo para desbloquear de una vez por todas el conflicto que afecta a la Rosaleda. Hasta la fecha el TSJ ha venido rechazando todas las propuestas presentadas para legalizar la plaza, después de que en 2005, a raíz de una denuncia planteada por La Carrasca, resolviese que su remodelación para habilitar un aparcamiento subterráneo no se ajustó a la normativa de zonas verdes.

El fallo exigía que la zona de ajardinamiento se situase a la misma rasante que las calles circundantes, lo que comprometía el futuro del parking.

Con estos antecedentes, el Consistorio ha estado trabajando en los últimos meses en un nuevo diseño que cumpliese con los requisitos judiciales, y de hecho, ya se dispone de algunos esbozos fruto de las conversaciones que se han venido manteniendo con La Carrasca para consensuar la propuesta final.

Tal y como informó este diario, el diseño en cuestión dejaría la plaza totalmente plana y a la misma rasante que las calles que la rodean, suprimiendo todos los elementos que sobresalen en la actualidad. Este es el caso de las escalinatas, que desaparecerán. Asimismo, se habilitará una zona verde con caminos centrales.

Y todo ello consiguiendo que no se reduzcan las plazas del aparcamiento subterráneo, lo que evitará posibles reclamaciones de compensaciones económicas por parte de la empresa que gestiona el parking.

Lo que está todavía por concretar es si el monumento dedicado a San Jorge podrá continuar en la plaza o se tendrá que trasladar a otro lugar.

Con todo, y para poder desarrollar esta propuesta, era necesario rescidir el contrato con el arquitecto que diseñó el anterior proyecto, que no reunía los requisitos exigidos por el TSJ. Pues bien, el trámite lo ha consumado la junta de gobierno, de manera que ya no hay obstáculo para que otro profesional elabore el nuevo anteproyecto con las características antes subrayadas.

Visto bueno

El alcalde, Antonio Francés, explicó que la propuesta estará elaborada en el plazo de un mes o mes y medio, y que de inmediato será remitida al tribunal para que otorgue su visto bueno. A partir de ahí se iniciará la redacción del proyecto definitivo, con la intención de que las obras, finalmente, puedan ejecutarse a lo largo del próximo año, lo que terminará con este largo conflicto.