La última edición de Feria Hábitat Valencia fue el escenario ayer del encuentro, por primera vez en la historia, de un nutrido grupo de empresas ganadoras del Premio Nacional de Diseño a lo largo de sus treinta años de recorrido. La Fiesta del Diseño, así se ha denominado el evento, ha sido organizado por RED Aede y Actiu, de Castalla, la última galardonada con este reconocimiento.

Figueras, Metalarte, Mobles 114, Nanimarquina, Punt Mobles, Santa&Cole, Simon y Actiu han sido las participantes en un interesante debate sobre el estado del diseño en nuestro país, que se ha celebrado en el espacio Actiu Meeting Point de Feria Hábitat y que ha estado moderado por Juan Mellen, Director Ejecutivo de RED.

Todos los participantes han coincidido en su visión de gran potencial, autenticidad y fuerza del diseño nacional, aunque también han reconocido que la estrategia de comunicación llevada a cabo, sobre todo a nivel internacional, no ha sido suficiente.

Vicent Berbegal, presidente y fundador de Actiu, Premio Nacional de Diseño 2017, ha destacado que “el diseño español está conquistando el mundo porque transmite valores de dinamismo, calidez, colorido y sobre todo funcionalidad de sus productos. El diseño en España lo hemos contemplado desde una perspectiva de creatividad unido al concepto de uso, de transmitir aquellas soluciones que necesita la sociedad, sin restricciones, ni límites. Y esa es la diferenciación que nos da valor”.

Según ha resaltado la directora Estratégica de Marca de Actiu, Soledat Berbegal, quien ha sido la encargada de representar a la fiam alicantina en este encuentro, “somos impulsivos y pasionales. Durante dos años hemos trabajado para conseguir este premio y ahora queremos compartirlo y que sea el principio de algo mucho más grande, que pueda continuar en el tiempo y que consiga poner de relevancia la fuerza del diseño y de las empresas de nuestro país”.

Las ocho empresas participantes han compartido con el numeroso público asistente qué supuso en su día recibir el reconocimiento al diseño de mayor prestigio a nivel nacional. Punt Mobles, que recibió el Premio Nacional de Diseño en 1997, ha destacado, de la mano de su fundador, Vicent Martínez, que “a lo largo de estos 20 años hemos vivido un cambio muy importante en España en cuanto a la concepción del diseño. Cuando empecé fui empresario y emprendedor por carencia, por no encontrar empresas que fabricaran lo que yo estaba haciendo. Había que generar un sector moderno. Poco a poco fueron aparecieron escuelas, profesionales, generaciones apasionadas que creían en el diseño. Actualmente contamos con importantes referentes”.

Figueras fue Premio Nacional de Diseño en 2013, tras presentarse 13 veces, tal y como ha reconocido su Design Manager, Pau Borrás, “fuimos insistentes. El premio significó un reconocimiento a la autenticidad, una empresa es auténtica cuando tiene un relato detrás y creo que todos los que estamos aquí lo tenemos”, ha señalado Borrás. Figueras nació con un perfil industrial que continúa marcando su ADN y al que incorporaron con el tiempo el diseño como valor intrínseco de su estrategia.

El Premio Nacional de Diseño supone un reconocimiento a la trayectoria y a una forma determinada de hacer las cosas, además de un gran impulso para todas aquellas compañías que lo reciben. Un argumento en el que han coincidido todos los presentes.

Nanimarquina, fue la primera empresa fundada por una mujer que recibió el Premio Nacional de Diseño en 2005. Representada en la Fiesta del Diseño por María Piera, directora general y segunda generación de la empresa, ha asegurado que “fue un empujón muy grande para todos los que formaban parte de la firma. El diseño ha sido una manera de vivir y entender la empresa. El premio es una confirmación”.

En la misma línea se ha manifestado Tomeu Gomila, Director de Marca de Metalarte, que recibió el galardón en 2004, “el premio te abre puertas, nuestra producción se vende en un 80% fuera de España, y te posiciona cualitativamente. Además, es una muy buena herramienta de comunicación”. Gomila ha sido el único de los participantes a quien han preguntado a qué empresa le daría el próximo Premio Nacional de Diseño y, recogiendo el guante, el Director de Marca de Metalarte ha afirmado que “a Gandía Blasco, porque tienen una historia muy interesante”.

Santa&Cole, Premio Nacional de Diseño en 1999 y Mobles 114, en 2001, fueron dos ejemplos de empresas que nacieron por y para el diseño como base de su actividad. Para ellos el diseño perdura más allá de la vida de una empresa. De hecho una de las actividades más destacadas de Mobles 114, según señala su directora General, Mercé Rovira, es la reedición de piezas clásicas como la lámpara Gira o la butaca Torres Clave.

Simon, es la empresa con mayor trayectoria profesional a sus espaldas, participante en este encuentro. Recibió el Premio Nacional de Diseño el año pasado, coincidiendo con la celebración de su centenario. Salvi Plaja, su Design Manager, ha destacado que “nos preparamos mucho y nos arriesgamos a presentarnos el año de antes y año del centenario”. Plaja ha comentado que una de las cosas que más cuestan mantener en el tiempo es “ser fiel al cuidado de los detalles. Detalles en la forma de comunicar, de fabricar, en el trabajo de nuestra gente. Para nosotros es parte de nuestra identidad, cuidar hasta de aquellos detalles que no se ven, como las partes no vistas de nuestros productos. Son valores que contribuyen a mantenerte a lo largo de tantos años”.