El Ayuntamiento de Alcoy está revisando los sistemas de evacuación de aguas del recientemente remodelado puente de San Jorge, después de que el pasado sábado quedase inundado en el transcurso de una tormenta. Operarios municipales procedían ayer a la retirada de las rejillas situadas en los desagües, que habían quedado obstruidas.
Apenas una semana después de la reapertura al tráfico del puente de San Jorge, una tromba de agua registrada en la tarde del sábado lo inundaba casi por completo, provocando que los vehículos, al pasar, mojasen a los peatones que circulaban por las aceras. La incidencia de registró en la parte más cercana a la calle Santo Tomás, donde el agua llegaba de parte a parte de la calzada.
Las críticas por este hecho no tardaron en llegar, sobre todo a raíz de un vídeo que ha estado circulando por las redes sociales. Desde el PP, su portavoz, Rafa Miró, criticaba a través de Radio Alcoy que «no se haya tenido en cuenta en las obras un sistema de evacuación de aguas pluviales. Un puente de este nivel no admite experimentos, y todo tendría que haber funcionado a la perfección desde el primer minuto. No puede ser que los alcoyanos sintamos verguenza al ver cómo este vídeo circula por toda España».
También Ciudadanos, por medio de la concejal Maribel Sánchez, criticaba «el mal resultado que en estos momentos está dando la obra ralizada en el puente», añadiendo que «los alcoyanos estamos realizando un gran esfuerzo en la reparación de esta infraestructura tan importante, y deseamos que cuando los trabajos estén finalizados y recepcionados por el Ayuntamiento, el puente se encuentre en las condiciones que todos ambicionamos».
Con todos estos antecedentes, en la mañana de ayer operarios municipales procedían a revisar todos los desagües del puente, averiguando la razón por la que no habían funcionado como es debido.
Y es que, con el objetivo de que no se viera la parte de debajo de la plataforma, la empresa encargada de las obras había colocado unas rejillas que se habían obstruido con colillas y otros desperdicios, evitando el correcto paso del agua.
La solución, al menos a corto plazo, consistió ayer en la retirada de dichas rejillas, en previsión de que pueda registrarse un fenómeno similar. Además, estaba previsto que durante la noche se ralizaran pruebas de drenaje con un camión cuba para comprobar que las medidas adoptadas funcionan.
El concejal de Obras, Jordi Martínez, manifestaba que «todos sabemos que hay gente en Alcoy a la que le molesta que estemos areglando el puente de San Jorge. Primero quisieron hacernos creer que el tránsito sería un infierno todo el verano, después intentaron crear alarma social con el amianto que iba a paralizar la obra, y ahora la noticia es que es una piscina cuando hablamos de una infraestructura que todavía está en obras».
Así, añadía que «el hecho es que después de 30 años tendremos un puente como toca y si surge alguna incidencia haremos lo que esté en nuestra mano para arreglarla». En este sentido, dejó claro que el Ayuntamiento no recepcionará la obra «mientras no se encuentre todo en condiciones».
