El bando moro ha tomado el relevo esta tarde a los cristianos en las Fiestas de Ibi. La Entrada de las huestes de la media luna ha sido espectacular desde el principio, en que el capitán de los Chumberos ha lucido una comitiva brillante y llena de colorido. El embrujo y el exotismo oriental ha invadido hasta el último rincón de la villa juguetera, con un público todavía más numeroso si cabe que el de la mañana. Tuareg, Mudéjares, Almorávides, Beduinos, Piratas y Argelianos han precedido al capitán, en un desfile que ha terminado bajo una lluvia ténue y con temperaturas bajas, que tanto festeros como espectadores han aguantado impasibles.
