La Conselleria de Educación ha anunciado que abrirá una unidad de Bachillerato en el instituto Andreu Sempere para garantizar la oferta en Alcoy, una aula que será mixta y contará con 35 plazas. La Comisión de Escolarización Municipal asignará las vacantes el próximo día 25 a los alumnos que se han quedado sin centro asignado. La administración autonómica, asimismo, ha insistido en que ningún alumno se quedará sin matricular.
Tal y como avanzó este diario, el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) suspendió la resolución de la Conselleria de Educación que negaba la renovación del concierto educativo para un aula de Bachillerato en el colegio La Salle de Alcoy. La medida es cautelar, por lo que exige al centro que deposite el importe equivalente a la financiación pública, a fin de que la Generalitat pueda recuperarlo en el caso de que se desestime el recurso interpuesto por el colegio.
El centro, al conocer la decisión del TSJCV, volvió a manifestar su desacuerdo con la eliminación de una unidad de primero de Bachillerato y criticó que el Consell justificase en su momento la medida con que había suficiente oferta pública en Alcoy, cuando, tras la publicación de las listas «en torno a 40 alumnos se han quedado sin plaza», así como que «de haberse mantenido el aula habría oferta suficiente».
Así las cosas, ayer la Conselleria de Educación anunció que abrirá una unidad mixta en el instituto Andreu Sempere que contará con 35 plazas, a fin de garantizar la oferta en la ciudad.
La administración pública, además, explicó que «cada año se hace una estimación provisional de las plazas de gente que pasa de cuarto de ESO a Bachillerato» y se ajusta cuando aparecen los listados definitivos del alumnado que quiere matricularse.
Una vez conocida la demanda, el Consell aseguró que en el caso de Alcoy «hay 15 estudiantes de Secundaria que sólo habían marcado una opción de centro para Bachillerato y no han obtenido plaza en él». No obstante, desde Educación insistieron en que «estos alumnos, por supuesto, no se quedarán sin escolarizar».
En este caso, el próximo día 25 de julio se reunirá la Comisión de Escolarización Municipal, en la cual, destacaron desde la la administración autonómica, se asignará centro a todos los que se han quedado fuera.
El concejal de Educación, Alberto Belda, lamentó ayer la situación que se está viviendo y aseguró que «entiendo la preocupación de las familias», pero el Ayuntamiento «es este proceso no puede hacer nada». Si bien es cierto que el consistorio solicitó en su momento a la Conselleria que renovase el concierto al colegio La Salle, pero «no nos han hecho caso».
Por su parte, desde Educación recalcaron que «todo el alumnado que el próximo curso estudiará primero de Bachillerato tiene la plaza asegurada en alguno de los centros educativos financiados por la administración pública de la ciudad».
La decisión de la Generalitat de suprimir la unidad en La Salle y ahora abrir una en el Andreu Sempere no ha sido del agrado de las familias afectadas ni del propio centro, tal y como ha podido constatar este diario.
