Una fiesta que se le va de las manos al alcaldable de Beniarrés y le puede costar caro. Francisco Sellés, del PP, se ha visto envuelto en una polémica por unas fotografías en las que salen varias personas tomando copas dentro del Ayuntamiento. Según ha podido constatar este diario, Sellés asistió el sábado por la noche a la fiesta de quintos que se celebró en la plaza de la Iglesia y que acabó dentro del consistorio.

Aunque en las imágenes no aparece el concejal del PP, los grupos de la oposición, Compromís y PSOE, aseguran que fue éste quien abrió y permitió que el resto de integrantes del grupo siguiesen tomando copas dentro de las diferentes estancias.

Las fotografías, que desde entonces circulan a través del servicio de Whatapp, muestran cómo varias personas se sentaron en el salón de plenos y se pusieron, a modo de capa, las banderas de la Comunidad Valenciana y de la Unión Europea .

Cabe recordar que el pasado jueves el alcalde, Luis Tomás, anunció su renuncia al cargo por motivos personales tras trece años en el cargo y que, precisamente, Sellés fue el elegido por el grupo popular para ocupar su puesto en un pleno que, previsiblemente, se tiene que celebrar esta misma semana. Este diario intentó ayer, sin éxito, ponerse en contacto con el futuro primer edil de Beniarrés para conocer su versión de los hechos.

Mientras, los ediles de Compromís y PSOE mostraron su indignación por lo sucedido y pidieron a Francisco Sellés que dimita. Los socialistas, a través de un comunicado, mostraron su preocupación e indignación por los hechos ocurridos «a altas horas de la noche» en el ayuntamiento.

«Saraos»

Según el PSOE, «no es la primera vez que se utiliza la institución para montar saraos que nada tienen que ver con la función del consistorio», por lo que exigen la dimisión inmediata del regidor del PP que «ha abierto el salón de plenos para continuar allí una fiesta».

Según el comunicado, «en una sociedad democrática, el respeto a los símbolos y las instituciones es el respeto al pueblo al que representan, y más si esos símbolos son un Ayuntamiento, que es la casa donde están representados todos los vecinos, y una bandera».

El incidente que tuvo lugar en el consistorio es propio de «una república bananera, y denota la falta de respeto hacia la institución que representa a nuestro pueblo, haciéndose fotos en el salón de plenos, bebiendo cubatas, rodeándose de las banderas o sentándose en la mesa del máximo representante de Beniarrés», sostiene el duro comunicado de los socialistas.

El PSOE carga toda la responsabilidad en «la persona que dispone de la llave del ayuntamiento, que ha entrado de forma deliberada y no ha impedido» la celebración de la fiesta.