El pantano de Beniarrés ha abierto una de sus compuertas al encontrarse al límite de su capacidad tras las nevadas y las fuertes lluvias del pasado lunes. El embalse, en concreto, se encuentra en estos momentos a un 87%, el nivel máximo que permite la Confederación Hidrográfica del Júcar en esta época del año en previsión de que se produzcan temporales como el que se ha registrado. Cabe reseñar que la presa, que llegó a presentar mínimos históricos este pasado verano, ya tenía unas importantes reservas tras las intensas precipitaciones de los meses de diciembre y enero