El temporal de frío y nieve obligó a suspender ayer las clases en centros educativos pertenecientes a 24 municipios de la provincia de Alicante, principalmente de las comarcas de l'Alcoià, El Comtat y las Marinas. En conjunto fueron más de 31.000 los escolares que se vieron afectados por esta medida.

La mayor parte de los alumnos, un total de 9.500, pertenecen a Alcoy. Como quiera que la nevada comenzó justo después de que ya hubiesen iniciado las clases los estudiantes de Secundaria, el Ayuntamiento decretó inicialmente la suspensión para los de Infantil y Primaria. Sin embargo, la medida terminaría afectando al final a la totalidad de los centros. Este hecho provocó cierta confusión entre los padres.

También destacan los 7.013 escolares de Dénia, los 1.581 de Benissa, los 1.397 de Cocentaina, o los 986 de Pego. Asimismo, resultaron afectados por la suspensión poblaciones como Biar, Muro, Gata, Els Poblets, Senija, Teulada-Moraira, El Verger, Xàbia, Xaló, Benilloba, Agres o L'Orxa, entre otros.

Hay que descatar que muchos de los colegios en los que ayer se suspendieron clases reciben alumnos de otras localidades, los cuáles tenían dificultades para desplazarse por el estado de las carreteras.

Para la jornada de hoy jueves, y en previsión de que registren nuevas e intensas precipitaciones en forma de nieve, ya hay municipios que han anunciado que la suspensión de la actividad lectiva va a continuar vigente. Este es el caso de Alcoy, que adoptó esta decisión tras una reunión celebrada por el alcalde, Antonio Francés, y los responsables de la Policía Local, Servicios Municipales y Protección Civil. También las poblaciones de Ibi, Castalla y Onil han informado que no habrá clases debido a que está declarada la alerta roja por nevadas por parte de AEMET.