El Ayuntamiento de Alcoy estudia la viabilidad de implantar autobuses eléctricos en su red de transporte urbano. La Concejalía de Movilidad está preparando el reemplazo de parte de la flota que presta servicio en la ciudad por vehículos sostenibles en 2018.

El concejal de Movilidad de Alcoy, Jordi Martínez, explicó ayer que durante tres días los técnicos del departamento y el personal de la empresa concesionaria del servicio de autobuses urbanos, Tuasa, estarán probando un microbús eléctrico con capacidad para 30 personas.«Las pruebas se están realizando para comprobar si un vehículo eléctrico es 100% compatible con la orografía de nuestra ciudad, por eso ayer [por el pasado miércoles] subimos con él a la Font Roja y la verdad es que aguantó bien», indicó el edil.

El autobús de prueba sólo tiene capacidad para 30 pasajeros, pero según recalcó Martínez, hay hasta de 50. «Estamos convencidos de que debemos ir incorporando progresos, ya que en 2018 estaremos obligados a renovar entre 5 y 8 vehículos de la flota por su edad», recalcó.

Ésta es por tanto el principal motivo que ha llevado al departamento de Movilidad a probar un vehículo eléctrico y comprobar si cumple con las características que requiere una ciudad como Alcoy.

Según explicó el concejal, hay varios sistemas de carga para este tipo de vehículos, pero para realizar las pruebas pertinentes durante tres días «hemos habilitado una zona de carga en Tuasa, en la zona de las cocheras».

Está previsto para este año el reemplazo de un autobús del servicio urbano, así como la redacción del proyecto de renovación de parte de la flota para 2018.

En la presentación del autobús de prueba estuvieron siete estudiantes procedentes de Finlandia, Holanda, Alemania y España que se han preparado durante cuatro meses en la Universidad de Utrech y que han elegido Alcoy para colaborar en su proyecto de SmartCity. Isabel Escarabajal forma parte del equipo en el que también colabora la UPV para aportar ideas y colaborar con el Ayuntamiento.