El Embajador Real ya tiene a punto su nueva carroza para recorrer mañana las calles de Alcoy anunciando la llegada de los Reyes Magos. Una empresa especializada de Agost ha restaurado la plataforma y ha reducido su peso, logrando una importante mejora de estética y seguridad para el desfile del Bando.

Todo está listo en Alcoy para recibir mañana al Embajador Real, quien anunciará la llegada de los Reyes Magos y recogerá las peticiones e ilusiones de niños y mayores a su paso por las calles del centro de la ciudad.

Tal y como adelantó el concejal de Fiestas, Raül Llopis, el actual formato del Bando Real cumple este año un cuarto de siglo y por ello contará con una importante mejora, la restauración de la carroza del Embajador.

La estructura conserva el diseño del alcoyano Alejandro Soler, pero le han mejorado su estética y seguridad. En declaraciones a este diario, el edil manifestó que «hacía años que no se llevaba a cabo ninguna actuación y era necesario».

Los reconstrucción la ha llevado a cabo un taller especializado de Agost, donde han mejorado uno de los elementos más significativos de la carroza, la estrella. En cuanto a seguridad, los operarios de la empresa han sustituido la actual plataforma por otra más ligera, reduciendo el peso.

En este sentido, el responsable de Fiestas explicó que al tratarse de una carroza de arrastre, el peso es muy importante. Además, de esta forma han logrado facilitar su transporte y que «sea más sencillo girar en esquinas pronunciadas como, por ejemplo, la del Cantó Pinyó».

Raül Llopis visitó el local en el que custodian la estructura acompañado por el concejal de Educación, Alberto Belda, para comprobar el resultado de la actuación, del cual están «muy satisfechos», aseguró. La gran estrella de la parte trasera es uno de los elementos estéticos más trabajados, ya que, según explicó Llopis, «ahora no se ve tan artificial, puesto que han utilizado piezas de fibra transparente».

Con la plataforma a punto y ultimando los preparativos del desfile, el concejal ha mostrado la misma emoción que sienten el resto de alcoyanos ante la inminente llegada del Embajador Real mañana y la de los Reyes Magos el jueves y a la espera de que se cumplan los deseos de quienes acudan puntuales a la tradicional cita para depositar sus cartas en los buzones de «les burretes».