Mañana se cumplen dos meses desde que se registrara el primer gran susto en el puente Fernando Reig, que obligaría a un cierre temporal, que tras el segundo incidente -la rotura definitiva de un tirante- pasaría a ser permanente. A las 11 de la mañana del 28 de julio, una tremenda sacudida de la plataforma -que pudo hundirse hasta un metro- obligó a sellarlo a cal y canto al tráfico y a los peatones, repitiéndose el problema la semana siguiente. Desde entonces, principios de agosto, el puente está cerrado y, a día de hoy, Fomento no ha informado de la reapertura. En el puente siguen los trabajos de reparación generales, que se complementan con los estudios sobre los tirantes. M. C.