La alarma vovió a activarse a las seis de la mañana de ayer, en la zona del término de Benasau, entre las áreas forestales de Tudons y La Serrella, que sufrió un importante incendio la pasada semana, al reaparecer las llamas de forma súbita. Los bomberos de La Montaña, que acudieron con dos dotaciones, consiguieron sofocar el siniestro tras dos duras horas de labor y sin que haya quedado completamente claro si se trató de un rebrote o de un nuevo incendio, según explicaron fuentes de los servicios de extinción a este diario.

El fuego se desencadenó ayer, a las seis de la mañana, pero nunca llegó a alcanzar una gran magnitud, afectando sobre todo a matorrales y monte bajo. Por ello, no fue necesario activar el despacho automático que envía de inmediato medios aéreos, básicos para frenar la propagación de las llamas.

Dos dotaciones de los bomberos consiguieron controlar las llamas con rapidez, procediendo de inmediato a sofocarlas y a refrescar toda la zona afectada y sus inmediaciones. Sobre las ocho horas, los servicios de extinción pudieron retirarse una vez el incidente estuvo zanjado.

De momento, no se conoce con exactitud el origen del siniestro de Benasau; si en un primer momento se hablaba de intencionalidad directa, posteriormente se ha apuntado la hipótesis de la colilla, dado que el siniestro se originó al lado de la carretera Alcoy-Benidorm, cerca de Ares del Bosc. Allí, apoyado por el fuerte viento, se expandió con rapidez hacia el puerto de Confrides y La Serrella, no pudiendo ser atajado hasta la mañana siguiente, gracias a dura labor de contención nocturna y a una evolución favorable de las condiciones meteorológicas.

De momento, no está claro si el incidente de ayer es un rebrote del grande o si por el contrario se ha tratado de un nuevo incendio.