Controles esporádicos y cambiantes. «Que no sepan nunca dónde se van a poner», decía ayer el concejal de Seguridad Ciudadana, Raül Llopis. Esta afirmación se producía después de que un control de tráfico y documentación, efectuado por la Policía Local en la mismísima plaza de España de Alcoy, ante la puerta de gala del Ayuntamiento, detectara un vehículo con estupefacientes y objetos inadecuados, según informaron ayer fuentes del cuerpo.

La Unidad Canina investigó el vehículo y su miembro perruno empezó a ladrar de forma contundente e ininterrumpida, por lo que se apartó a los tres usuarios, a los que se levantó acta por tenencia de estupefacientes. Igualmente, se incautaron objetos considerados «peligrosos».

En la jornada del lunes, la Policía Local se desplegó en tres puntos distintos, con Alzamora y la Alameda además de la plaza de España, efectuando controles aleatorios de documentación y comprobación de la seguridad. El concejal Llopis indicó que estas operaciones dan sus resultados y, en consecuencia, van a continuar en la medida de las posibilidades.