Los alojamientos rurales del interior de la provincia de Alicante han confirmado sus previsiones y están viviendo el mejor verano desde el inicio de la crisis. La ocupación va a acercarse al 80%, un porcentaje muy superior al de años anteriores. La reactivación económica y el esfuerzo promocional de los hoteleros son los principales factores que se esconden detrás de esta reactivación. El sector, sin embargo, sigue quejándose de la falta de apoyo por parte de las administraciones públicas en materia promocional.

Los alojamientos rurales parece que empiezan a ver la luz al final del túnel. El sector ha sufrido con especial virulencia la crisis económica y, si bien se defendía más o menos bien durante las épocas de Semana Santa, Navidad y los puentes festivos, la ocupación apenas llegaba a alcanzar el 40% durante el verano. Este hecho ha tenido efectos muy negativos sobre determinados establecimientos, algunos de los cuáles se han visto incluso abocados al cierre.

Sin embargo, la situación está experimentando un cambio radical. Los porcentajes de ocupación han ido mejorando desde que se inició el año, en una recuperación que ha tenido su plena confirmación con la llegada del verano. Las previsiones que manejaba el sector se han cumplido y la ocupación, que ya se movió por encima del 60% en julio, se situará este mes de agosto con las reservas de última hora cerca del 80%, de acuerdo con las cifras a las que ha tenido acceso este diario.

La presidenta de la Asociación Alicante Interior, Indira Amaya, explicaba que uno de los factores que han propiciado esta recuperación es, lógicamente, la reactivación económica. «La gente ha mejorado su poder adquisitivo, lo que ha propiciado además que las reservas se realicen con mayor antelación. Hasta hace bien poco casi todo el mundo se esperaba prácticamente al mismo día».

El otro factor que según Indira Amaya está influyendo de manera muy positiva es la promoción que están realizando los propios establecimientos a través de publicidad y presencia en revistas y webs especializadas, así como su apuesta por mejorar la calidad tanto de las instalaciones como de los servicios.

El sector, en cambio, sigue echando en falta un mayor apoyo de la administración a nivel publicitario. «Mucha gente continúa sin saber que muy cerca de la costa existen unos parajes y unos municipios con unos grandes atractivos, así como unos alojamientos de gran calidad y profesionalidad. Es necesario apoyar más al sector, porque contribuye a la creación de empleo y también a difundir las bondades de las comarcas del interior», enfatizó Amaya.

Cabe recordar que los alojamientos rurales también han venido reivindicando en los últimos tiempos un refuerzo de las inspecciones, toda vez que el fenómeno de la competencia desleal está muy extendido y son numeras las casas de particulares que se han estado alquilando sin estar dadas de alta como negocio.