La Guardia Civil desmanteló ayer un centro de mayores ilegal en un chalé situado a las afueras de Castalla, procediendo además a la detención de sus responsables. La residencia estaba ocupada por cuatro ancianos en el momento de la operación, quienes no estaban siendo atendidos de manera adecuada. En un primer momento se destuvo al matrimonio británico que regentaba el negocio ilegal, y hoy ha notificado la Guardia Civil que son cinco en total los detenidos, todos miembros de la misma familia.
Según la información a la que ha tenido acceso este diario, la operación, llevada a cabo por la Guardia Civil de Castalla y el Grupo de Investigación de Ibi, contó además con la colaboración de la Conselleria de Bienestar Social.
Los agentes procedieron al registro de las instalaciones, comprobando que el establecimiento no contaba con ninguna documentación que le facultase para el desarrollo de esta actividad.
En el momento de la intervención había cuatro mayores residentes, cuyos familiares se hicieron cargo de los mismo.
La Guardia Civil procedió a la detención de los dos presuntos responsables del centro ilegal, un matrimonio británico, y ayer se informaba que otros tres miembros de la misma damilia también habían sido detenidos. Además, se informó que cobraban cuotas de hasta 500 euros a la semana por atender a los ancianos.
La residencia en cuestión se encontraba en un chalé situado a las afueras de Castalla, en las proximidades del acceso al municipio desde Alicante. Según ha podido saber este diario, había rumores acerca de su existencia desde hace años.
