El Ministerio de Fomento volvió a cerrar a primera hora de la tarde de ayer el puente Fernando Reig de Alcoy con el objetivo de sustituir el tirante dañado y realizar un estudio pormenorizado de toda la estructura. El Ayuntamiento criticó la falta de explicaciones respecto al corte de la circulación en particular y a lo que está aconteciendo con las obras que se ejecutan en el puente en general.

La Policía Local recibía ayer alrededor de las 15 horas una llamada de una técnica de las obras de reparación del puente Fernando Reig, solicitando que se cerrara al tránsito de vehículos y de peatones. De esta forma se enteró el Ayuntamiento de este nuevo corte de la circulación, tan sólo seis días después de que quedase reabierta al considerar los expertos que el crujido registrado el pasado día 28 de julio en un tirante no suponía ningún tipo de riesgo.

Fuentes de la Delegación del Gobierno señalaban después a este diario que la medida había sido adoptada por seguridad, mientras se desarrollan los trabajos de sustitución del tensor.

Además, el propio Ministerio emitía más tarde un comunicado en el que informaba de que el corte es provisional para poder evaluar detenidamente el comportamiento del puente. La nota indicaba que ayer se había realizado un ensayo, tras el cual los técnicos decidieron proceder a un nuevo análisis pormenorizado. Una vez realizado, el puente se volverá a abrir al tráfico en el carril sur.

Los agentes de las Policía Local procedían a habilitar los mismos desvíos que en la anterior ocasión, de manera que en el Camí de la Murtera se ha vuelto a invertir el sentido de la circulación.

Con todo, y ante este panorama, la indignación era ayer más que manifiesta en el Ayuntamiento. Tanto el alcalde, Antonio Francés, como el edil de Seguridad, Raül Llopis, expresaban su malestar por la falta de explicaciones. «No se nos está informando respecto a lo que pasa en una obra de infraestructura tan importante para la ciudad de Alcoy, y además tampoco sabemos cuanto tiempo se va a mantener el corte», lamentaba el concejal, quien añadía que «la opacidad es total».

Llopis recordaba que esta obra dependiente del Ministerio de Fomento se inició en julio de 2015 «con urgencia» para reparar las barandillas, eliminar oxidaciones en los tirantes y el mantenimiento general de la plataforma, y que la misma tendría que haber estado terminada en diciembre pasado.