El estudio técnico elaborado para la licitación de la nueva contrata de recogida de basura y limpieza viaria de Alcoy contempla la recuperación del baldeo de calles en toda la ciudad tras las restriciones impuestas en su día a causa de los brotes de legionela. El documento, asimismo, plantea también la retirada de los contenedores del centro en horario diurno, la recogida de residuos puerta a puerta en los polígonos industriales y la ampliación de las zonas de barrido manual.
La concejalía de Medio Ambiente ya ha remitido a los grupos de la oposición el estudio técnico elaborado por la empresa Lovic para el pliego de condiciones del nuevo servicio de recogida de residuos y limpieza urbana. El documento ha sido enviado igualmente al Consejo de Medio Ambiente para su debate.
El estudio de trabajo presenta diferentes propuestas para el pliego de la gestión de residuos y limpieza, caducado desde hace años. Entre ellas figura la iniciativa de incorporar dos o tres máquinas de limpieza con agua y un camión cisterna para el baldeo de toda la ciudad.
Cabe reseñar, en este sentido, que el riego a presión había quedado muy limitado tras las restricciones impuestas en su día por los sucesivos brotes de legionela. El baldeo, en concreto, se lleva a cabo de forma manual y prácticamente sólo en las calles del casco antiguo. La situación, sin embargo, ha cambiado, toda vez que la incidencia de la legionela es en la actualidad prácticamente nula.
El estudio técnico, asimismo, propone probar en el centro histórico una experiencia de contenedores de «quita y pon», los cuáles estarían operativos sólo de ocho de la tarde a dos de la mañana. Se trataría de receptáculos más pequeños que los actuales, con la finalidad de que las calles estén más libres. También se pretende con esta propuesta, con el acuerdo de los comerciantes y hosteleros, reciclar un porcentaje superior de vidrio y cartón.
Para los polígonos se plantea una recogida puerta a puerta. Cada empresa tendría un contenedor pequeño de cartón y uno de restos para evitar los pequeños vertederos que se generan en algunos puntos como consecuencia de vertidos. El objetivo que se persigue pasa por cumplir los índices de reciclaje que exigirá la Unión Europea en 2020. De igual forma, se presentan dos tipos de recogida, lateral o bilateral, dependiendo del camión. Ambas tienen ventajas y desventajas que serán sometidas a debate.
El concejal de Medio Ambiente, Jordi Martínez, manifestaba que «la intención es sacar un contrato de unos cuatro años más una prórroga de dos años. De esta forma podremos ir viendo las necesidades y los cambios de la ciudad y no estaremos encadenados demasiado tiempo con un servicio que pueda quedarse obsoleto muy rápido».
