El sector textil acabó con 2015 con un balance positivo, con muchas empresas con beneficios por primera vez desde 2008, una situación que abría perspectivas a nuevos proyectos o a renovación de maquinaria, como señaló el presidente de Ateval León Grau. Así, efectivamente, hay industrias que han hecho renovación tecnológica y otras que han abierto nuevos caminos, como es el caso del grupo Jover de Cocentaina -liderado por la familia alcoyana Jover- que ha adquirido la marca KA Internacional y está trabajando para reactivarla.

Surgida como el Kilo Americano (KA) en 1984, «importaba los productos de América y los vendía a kilos, y de ahí el nombre», explica Lucía Jover, brand manager responsable del proyecto. KA llegó a tener «más de 450 puntos de venta, siendo una cadena muy conocida, con un producto asequible para el público con buena relación calidad/precio», subraya. La crisis, el cataclismo económico vivido a partir de 2008 hizo que la firma fuera en declive, reduciéndose en los últimos tiempos a 70 tiendas.

El grupo Jover, con 51 años de actividad que le han convertido en una empresa puntura de los textiles para el hogar, aprovechó la oportunidad el año pasado y adquirió la marca, «con más de 30 años de actividad en el mercado español y muy conocida. Se ha caracterizado siempre por el predominio de los tonos pastel, siendo como el Massimo Dutti de los textiles de hogar, también para el mueble y la tapicería». Lucía Jover significa que el objetivo es mantener el espíritu de la marca y relanzarla. «La primera colección la presentamos en Frankfurt, en el certamen de enero y ahora estamos ultimando la segunda, que se lanzará en la feria de septiembre», es decir en el segundo evento de la recuperada «Textilhogar», que ahora se celebra en Madrid.

Hasta la fecha, el grupo Jover ha podido constatar que Ka «sigue siendo un producto asequible para el público, con una buena relación calidad/precio. Ahora se lleva mucho tono geométrico, pero siempre dentro de la gama de colorido y diseño habituales», agrega. La oferta se dirige tanto a los productos de visillos y tapicería, que se desarrolla en todas sus vertientes: sofás pufs, sillones, sillas, etc.

La principal circunstancia que ha derivado en la puesta en marcha de esta operación ha sido la coyuntura económica, algo más favorable que en los últimos tiempos. «La verdad es que estamos muy contentos por haber podido llegar hasta aquí, ya que ahora se nota que todo va mejor. La estructura que tenemos nos permite desarrollar esta marca, que producimos en fábrica y luego comercializamos. Un elemento favorable es que ahora se valora mucho que la producción sea española; las empresas nacionales tenemos prestigio y hemos quedado pocas después de los tiempos que hemos pasado», resalta Lucía Jover.

La empresa ha asumido la producción de la nueva marca, lo que ha permitido efectuar contrataciones. Paralelamente, la cadena sigue manteniendo las tiendas, que ahora se está trabajando para ampliar. «Estamos impulsando nuevos tipos de venta, no a través de franquicias, que en el sector textil son complicadas, sino a través de un nuevo modelo de negocio», concretamente denominado «shop in shop», diseñado para compartir espacios con otros negocios que pueden ser complementarios. En total, Ka dispone actualmente de más de 1.500 referencias de telas en stock permanente, con servicio de confección a medida de todo tipo de cortinas, ropa de cama y mesa, a lo que se suman 140 modelos de mueble tapizado.

La cadena dispone de tiendas en España, com también en Holanda, Francia, Italia, Polonia y Rusia, entre otros países, en una red que se está trabajando para ampliar de forma importante.

La primera experiencia con la colección Ka ha resultado satisfactoria y ahora se lanzará la segunda en Madrid, en una feria «que resulto muy positiva el año pasado, pues todo el mundo quedó contento. Ahora hay gran motivación para la nueva, en la que nosotros aprovecharemos para lanzar la segunda», indicó Lucía Jover.

De esta forma, el grupo Jover ha puesto el acelerador a raíz de su cincuentenario. A las telas clásicas que le han dado prestigio durante este medio siglo y que sigue diseñando, produciendo y exportando por todo el mundo, ha buscado hueco en el mercado para una nueva gama que le permite diversificar y consolidarse en una etapa en la competencia es cada vez mayor. De momento, los resultados de esta inversión han sido favorables.