La magia de Rocío Bazán se hizo notar en el Palau Comtal de Cocentaina, con una velada inolvidable que marcó el desarrollo del simposium/festival Sent-me, que cada año se consolida un poco más. En esta ocasión, la velada fue completa, con el público expectante y entregado, que vibró con la Orquesta sinfónica de la región de Murcia y la cantaora Rocío Bazán, todos bajo la dirección del contestano Ignacio García. «El amor brujo» de Falla fue el punto culminante de la velada, con el arte de la artista y la música, pero también hubo sitio para la obra del contestano Josep Vicent Egea y para Rimsky-Korsakov, con su «Capricho español».