El TSJ ha tumbado, a través de la sección 1 de la sala de lo Contencioso-Administrativo, la petición de suspensión cautelar de la ATE Alcoinnova de La Española que había efectuado el Ayuntamiento. La medida carece de repercusión material, como señaló ayer al respecto el concejal de Urbanismo Manolo Gomicia, pero supone un evidente triunfo moral para el proyecto y sus defensores, toda vez que se han rechazado por los tribunales las dos demandas falladas hasta ahora.

El Ayuntamiento ha planteado tres iniciativas judiciales contra la aprobación de la ATE por parte de la Generalitat Valenciana, durante el gobierno del PP. La primera, por usurpación de competencias urbanísticas, que ha sido desestimada y recurrida ante el Tribunal Supremo, donde está pendiente de fallo. La segunda, contra la aprobación de la ATE, que está a la espera de fallo y la tercera -desestimada ahora- que pretendía evitar que las obras comenzasen, para evitar perjuicios al paraje.

El TSJ entiende que no hay motivos para aceptar este concepto, sobre todo porque se ha hecho «sin aportar prueba de que dicho fenómeno se producirá», considerando a renglón seguido «insuficientes los argumentos utilizados para justificar el riesgo». Por ello, condena también en costas, aunque limitando el importe a 100 euros más IVA para las defensas de las partes codemandadas, como son la Conselleria de Infraestructuras y La Española. La sentencia es recurrible.

De entrada, como señaló Gomicia, el Ayuntamiento no ha decidido si lo hará. «Nos reuniremos con los abogados, estudiaremos la sentencia y luego se tomará una decisión», a la vez que indicó que la resolución judicial carece de efectos prácticos. «De momento no han empezado las obras y de hecho aún tardarán», señaló.

Actualmente, el proyecto de Alcoinnova carece de licencia de obras y para concederse «aún están pendientes algunos informes, de consellerias y de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). El que ha llegado señala alguna cuestión, que deberá trasladarse a la empresa, lo cual lleva su tiempo», impidiendo que todo el proceso se pueda completar.

Una vez esté toda la documentación cerrada, el Ayuntamiento concedería la licencia de obras de forma automática y el grupo La Española podría iniciar la construcción del parque tecnológico, salvo sentencia previa contraria.