El incendio registrado en la tarde del sábado en Alcoy, que amenazó el área industrial de Sembenet y las casas de Batoy, está siendo objeto de una investigación especial, toda vez que se considera que pudo ser intencionado. Más aún, se baraja la sospecha de que el autor o autores pudieron ser los mismos que la víspera habían ocasionado otro siniestro -en este caso, no pasó de ser un conato gracias a los servicios de extinción- en la Font del Quinzet, en la misma zona.

Las alarmas no descansan esta primavera en Alcoy, especialmente los fines de semana. Si el 21 de mayo se declaraba un incendio en plena sierra de Mariola, frente al Sargento, saldado con siete hectáreas de pinar y monte bajo calcinadas, una semana después se producía otro, en este caso en el cauce del río. Como se informó el domingo, el fuego se produjo en la parte baja del puente Fernando Reig y llegó a tocar naves del polígono Santiago Payá y se quedó muy cerca de casas de Batoy, requiriendo un fortísimo despliegue incluso de medios aéreos, con los hidroaviones bordeando las casas.

El concejal de Seguridad Ciudadana, Raül Llopis, ha expresado su inquietud por los últimos siniestros registrados, señalando que en esta última ocasión ha habido un evidente peligro para instalaciones y personas. «Se está investigando todo a fondo y se tiene la impresión de que puede haber habido intencionalidad», tanto en este siniestro como en el de la Font del Quinzet. Hay que significar que en fechas cercanas hubo otro en el Racó Sant Bonaventura, aunque en este caso se identificó al autor/autores, tratándose de menores.

Los técnicos están trabajando activamente para esclarecer lo sucedido en este incendio.