Las bases del futuro PGOU (Plan General Estructural en su actual denominación) de Alcoy pasaron ayer la primera reválida, con el informe favorable de la comisión informativa de Dinamización Económica, por lo que queda a la espera de la resolución que adopte el pleno del próximo lunes. El documento excluye el polígono de 2 millones de m2 que proponía el PP en Polop, como las propuestas lanzadas el pasado viernes por Compromís, pero sí tendrá en cuenta las alegaciones formuladas por Guanyar, que plantea incorporar una bolsa de plusvalías urbanísticas.

El documento avalado ayer con los votos del PSOE, la oposición de Compromís y la abstención de Guanyar, Ciudadanos y PP, mantiene la propuesta inicial de dotar suelo industrial en Pagos y Santiago Payá/Sembenet, así como en el área Alcoinnova por estar aprobada la ATE, pero desestima el resto de La Canal y la zona apuntada por el PP en Polop. «Está todo estudiado y consultado y no incluye lo que se han sacado de la manga últimamente», manifestó el alcalde Antonio Francés.

Tampoco se agregan «las ideas diferentes del modelo que estos días hemos visto de Compromís en los medios de comunicación», indica el edil de Urbanismo Manolo Gomicia, como tampoco «se ha apreciado interés en ver técnicamente los motivos o las posibilidades de aplicarlas». A su juicio, parecen «excusas para justificar un voto en contra» a la primera remodelación del PGOU «después de casi 30 años».

Precisamente, el portavoz de Compromís David Abad hizo hincapié en que este plan «es del PSOE», ya que «en ningún momento se nos han pedido previamente las propuestas por escrito, a fin de contrastarlas y opinar para consensuarlas». A su juicio, el diálogo con la oposición ha sido «para cubrir el expediente».

Ignacio Palmer, del PP, coincidió en ambos extremos: «no han aceptado nada, y al final ni La Canal ni Polop. Estamos ante un proyecto del PSOE, al que solamente nos queda la presentación de alegaciones».

Guanyar, por su parte, ha presentado propuestas en forma de alegaciones, que se debatirán durante el proceso de exposición pública. Su portavoz, Estefanía Blanes, plantea iniciativas como «crear una bolsa de plusvalías urbanísticas para disponer de fondos de inversión para lo que determine» el Ayuntamiento. Igualmente, sugiere que si finalmente se desestima Alcoinnnova, el terreno vuelva a ser agrícola, «como era su función antes de la operación urbanística».

Así, ahora, como señala Gomicia, si se ratifica en el pleno, se abriría un período de dos meses para las alegaciones y el envío a las diferentes administraciones. Posteriormente, se resolverían las alegaciones, que a su vez tendrían que ratificarse en el pleno.

El PGOU vigente fue aprobado por el pleno del Ayuntamiento en marzo de 1989.