La Feria de San Isidro de Castalla arrancó en la tarde de ayer en medio de un buen ambiente y con una amplia oferta merced a los 300 expositores que toman parte en el evento. Artesanía, automoción y alimentación son sólo algunos de los productos que se ofertan en este certamen, que también cuenta con múltiples alicientes en materia cultural y de espectáculos.

Castalla dio inicio en la tarde de ayer a la XXIV Feria de San Isidro, la cual se desarrollará a lo largo de todo el fin de semana. El certamen ocupa una superficie de 75.000 metros cuadrados en las calles más céntricas del municipio, donde se distribuyen 300 expositores de los más variados productos. Este es el caso de la artesanía, la automoción, la alimentación, la maquinaria y el comercio en general.

El Mercado Medieval vuelve a ser uno de los principales puntos de atracción, así como los numerosos espectáculos que se ofrecen de forma continuada. Pasacalles, malabares, equitación y correfocs configuran una oferta amplia y atractiva.

También se dispone de una zona de atracciones, otra de hostelería, talleres para niños y actividades deportivas, además de música en directo.

Toda una amalgama de alicientes para pasar un divertido fin de semana. Ayer las calles de Castalla ya registraron un buen ambiente, si bien será a partir de hoy cuando se produzca una mayor afluencia de visitantes.