La directiva de la Asociación de San Jorge ha acordado consolidar las subvenciones para la compra de la pólvora que se utiliza en el acto del Alardo de las Fiestas de Moros y Cristianos, con el fin de incentivar la participación de los festeros. Esta medida, según explica el ponente de Fiestas Francisco Cantó, ya se aplicó el año pasado, consiguiéndose un resultado satisfactorio, toda vez que la presencia activa de festeros se incrementó en un 10%, revirtiéndose de esta forma el declive creciente de ediciones precedentes.

El Alardo, en sus secciones de mañana y tarde, es para muchos el acto más espectacular de las Fiestas de Alcoy, pero su devenir ha estado marcado de forma tradicional por las difíciles relaciones con la administración por la cuestión de la pólvora.

El «golpe» más duro se produjo en 2002, cuando el Ministerio del Interior aplicó la limitación de un kilo de pólvora por festero y, más tarde, cuando Intervención de Armas de la Guardia Civil empezó a controlar de forma presencial el acto. La combinación de ambos factores acabó disuadiendo a multitud de festeros, de manera que de los más de 4.000 que disparaban en los años ochenta, la cifra cayó a la mitad -o incluso algo menos- en ediciones recientes. «¿Para qué complicarse la vida?», pensaban muchos festeros.

En 2013 se estableció un recorte del itinerario de 625 metros, con el fin de facilitar el uso de la pólvora, manteniendo la espectacularidad del acto, pero la «sangría» no se terminó. En este contexto, el año pasado la directiva acordaba establecer una subvención a la compra de la pólvora y los pistones, una medida que fue efectiva y contribuyó a recuperar festeros y ambiente; según los datos de la propia Asociación, el uso de la pólvora se recuperó alcanzando los 2.674 kilos con algo más de un 10% de participación añadida, lo que redundó en aras de la brillantez.

Para 2016, explica el ponente Francisco Cantó, la junta ha acordado mantener las ayudas, de manera que el kilo solamente costará 26 euros, ya que se subvenciona el coste de los pistones y el IVA de la operación. De esta forma, los dirigentes festeros confían en que se pueda mantener la línea que se puso en marcha el año pasado, mejorándola incluso si es posible. Hay que recordar que en la presente edición de las Fiestas, el Alardo se celebrará en domingo, lo que puede redundar en beneficio del ambiente y el público.