La cofradía del Cristo Agonizante de Alcoy ha decidido aplazar a 2017 el estreno de una nueva imagen. La falta de miembros en la entidad para poder portar las andas hace imposible que la Virgen de la Esperanza Macarena pueda formar parte en las procesiones de Semana Santa de este año.

Desde el año pasado, la parroquia del San Vicente y San Antonio, ubicada en la Zona Alta de Alcoy, cuenta con una nueva imagen, la de la Virgen de la Esperanza Macarena. La figura luce en uno de los laterales de la iglesia y está custodiada desde su llegada al templo por la tercera orden de Franciscanos en la ciudad, tal y como explica el padre Wenceslao, miembro de la orden y párroco de San Vicente y San Antonio.

A lo largo de este año, la cofradía del Cristo Agonizante ha trabajado en la restauración de las andas con el objetivo de que la Virgen de la Esperanza Macarena pudiese formar parte en las procesiones de Semana Santa de 2016. Sin embargo, debido a su peso, es necesaria la ayuda de numerosos cofrades para poder sacarla, según informa el vicepresidente de la entidad, José Luis Gisbert.

«Para la procesión del jueves, la del Silencio, no supone un problema porque el recorrido es corto -explica Gisbert-, pero el viernes es la del Santo Entierro y empieza en la iglesia de Santa María, lo que supone bajar la imagen, realizar el recorrido y devolverla a la parroquia». Para ello, «necesitamos más cofrades para ir intercambiándonos», recalca el vicepresidente del Cristo Agonizante, quien lamenta la falta de devotos jóvenes para ello.

Ante esta situación, la entidad y la parroquia han decidido aplazar su estreno a 2017, marcándose, además, dos objetivos: modificar las andas para que pesen menos e intentar que «haya más gente joven en la cofradía», apunta Gisbert, quien tiene muy claro que «para sacar la imagen hay que hacer las cosas bien».

Mejora de las instalaciones

La parroquia de San Vicente y San Antonio cuenta desde hace unos meses con una nueva capilla de oración y que «ha tenido muy buena acogida», destaca el párroco. La sala se encuentra a la izquierda, justo a la entrada del edificio.

La nueva dependencia cuenta con bancos de madera y un pequeño altar, así como con imágenes, entre las que destaca la del Jesuset del Miracle en la parte superior del altar.

En este sentido, el padre Wenceslao incide en que «todavía no está terminada, quedan algunos detalles», aunque sí está en funcionamiento, muestra de ello es que hay un flujo constante de feligreses, tal y como asegura el párroco. «La capilla será bendecida e "inaugurada" tan pronto esté completamente terminada», añade.