Los «manolos» tuvieron que dar cuenta de sus actividades en el día de autos, por usar una terminología apropiada, siendo los recuerdos variopintos. El teniente de alcalde Manolo Gomicia no tiene memoria de haber sido interrogado. «La verdad es que no lo recuerdo, pero diría que no; además, en aquella época ni siquiera vivía aquí», argumento por el que posiblemente se libró. Lolo (Juan Manuel Alonso), popularísimo hostelero, también se libró, pero no así su familia. «La Policía fue a mi casa y yo no estaba, pero interrogaron a mi madre y a mi hermana. Les preguntaron dónde estaba yo y si tenía escopeta», dijo. Tampoco fue interpelado Manolo Serrano, que ya trabajaba en la peluquería del Cantó del Pinyó, según ha confesado estos días. M. C.
