La inspección efectuada por Hacienda detectó irregularidades en cuatro proyectos ejecutados en Cocentaina, de los que el principal era la restauración general del paraje de Sant Cristòfol. En total importaban 100 millones de pesetas. Igualmente, se pusieron reparos a otra partida de 50 millones de pesetas para funcionamiento interno, sobre todo gastos de personal, y en una tercera de 20 millones de pesetas más para financiar diversos proyectos. Marcos Llorens, que era el gerente, ha reiterado que a Hacienda se le entregaron los justificantes de gasto y que todo el proceso se sustentaba en divergencias sobre cuestiones administrativas, en torno a los que fueron primeros Ceder en España aprobados por la entonces CE. nM. C.
