El debate y compleja votación del proyecto de Ordenanzas Fiscales para 2015 en Alcoy duró 1 hora y 40 minutos, pero hubo poco suspense: Ciudadanos ofreció su apoyo -por la rebaja del IBI y otros impuestos domiciliados- si se retiraba la controvertida medida de trasladar la fijación de los precios públicos a la Junta de Gobierno, como así decidió el ejecutivo que lidera Antonio Francés.

Al final, de cualquier manera, hubo más consenso del previsto, e incluso el PP y Compromís apostaron por apoyar algunas cuestiones. De hecho, la aceptación de la propuesta de la formación nacionalista de bonificar los vehículos eléctricos, que respaldó Ciudadanos, acabó generando cierto consenso.

Así, la rebaja del 2% en el IBI se aprobó casi por unanimidad, ya que el PP la avaló; únicamente Guanyar se abstuvo. En el impuesto de vehículos, que se congela y se bonifican los eléctricos, tampoco se logró la unanimidad por la abstención de Guanyar.

Vanessa Moltó, edil de Hacienda, defendió la propuesta del PSOE e hizo concesiones a los grupos de la oposición, especialmente en el mantenimiento de los precios públicos en el pleno.

David Abad, de Compromís, criticó el proceso y defendió la reducción para los coches eléctricos; Nacho Palmer, del PP, destacó que la reducción de impuestos iba en su programa. Tanto Palmer como José Miguel Antolí, de Ciudadanos, defendieron una mayor rebaja del IBI en los próximos años y este último ofreció su apoyo en general, si se retiraban los precios públicos a la Junta, como así ocurriría.

Estefanía Blanes, de Guanyar, fue la más crítica con el proceso y la postura de Ciudadanos, y planteó enmiendas, prosperando algunas, sobre todo para favorecer a los parados, familias monoparentales y numerosas en los precios públicos.

Adelante Entenza y Serelles

El Ayuntamiento, por otro lado, sigue adelante con la tramitación de los proyectos de Entenza y Serelles, tras desestimarse ayer la impugnación presentada.