Los vecinos de Benilloba, reunidos en asamblea, han acordado rechazar de plano la solicitud de Iberdrola de talar seis cipreses de la zona del Calvari con el fin de proteger una línea eléctrica. La alcaldesa Ana Delia Gisbert ha anunciado que pedirá una reunión con la dirección territorial de la compañía a fin de buscar una solución alternativa. Mientras los vecinos hablan de «intimidación», la compañía explica que la actuación cumple la legalidad y tiene los permisos necesarios.