La Conselleria de Infraestructuras se ha comprometido con el alcalde, Antonio Francés, a ejecutar las obras de demolición de las naves en ruina de la zona de la Beniata, que la semana pasada registraron un nuevo derrumbe.

Las antiguas instalaciones de Maquinaria Ceres, en la calle Alicante, están abandonadas desde los años setenta y pertenecen a la Generalitat. El Ayuntamiento declaró el complejo en ruina a partir de 2011 y comenzó a exigir a su propietario el derribo inmediato, lo cual no ha llevado a cabo y ha derivado en la imposición de sanciones de hasta 34.000 euros.

Ayer la Conselleria se comprometió a ejecutar los trabajos, después de que Francés la conminara «a asumir la responsabilidad de mantenimiento, evitando así cualquier peligro a los ciudadanos».