Las Entradas de Alcoy volvieron a atraer ayer a multitud de personas procedentes de todas partes de España. Por segundo año consecutivo, la zona del Parterre fue la concentró el mayor número de turistas, muchos de los cuales habían contratado la visita con touroperadores.

El traslado de las Fiestas a fin de semana ha propiciado, por segundo año consecutivo, que las calles de la ciudad se llenen de turistas procedentes de todas partes de España. El cambio de fechas fue agradecido por muchas de las personas que «de no ser así no podría venir a verlas» por motivos laborales.

Aunque dispersos a lo largo de todo el recorrido de las Entradas, la zona más concurrida por foráneos fue la avenida del País Valencià, sobre todo a la altura del Parterre, y la procedencia de lo más dispar, contando con vecinos de Barcelona, Sevilla y Castilla y León, entre otros lugares no menos destacados.

«Estamos alucinando», «esto es maravilloso», espectacular», fueron los comentarios que los turistas hicieron mientras contemplaban atónitos el paso de las 28 filaes. La música, el colorido y las ostentosas vestimentas cautivaron a quienes por primera vez acudieron a uno de los principales actos de la trilogía alcoyana.

Una vecina de Marchena, Sevilla, aseguró que «el montaje es maravilloso y la confección de los trajes me deja sin palabras», lamentando que «mañana nos vamos. Hemos venido un grupo de 60 personas».

Desde Palencia también llegaron dos autobuses con más de 100 personas. «Conozco las Fiestas de Moros y Cristianos de toda la vida, pero nunca había tenido la oportunidad de venir», explicó una de las integrantes del grupo, la misma que recalcó que «¡volveré!».

Las dificultades a la hora de encontrar las sillas asignadas fue una de las pocas reivindicaciones que hicieron los turistas.