Vecinos de Benilloba, Benifallim y Penàguila han reiterado su rechazo a la planta de lodos prevista en este último municipio. Un centenar de personas se ha reunido en asamblea para mantener la movilización, pese a considerar que el proyecto se ha paralizado, aunque no de manera definitiva.
La reunión se celebró el sábado en Benilloba, asistiendo a la cita los alcaldes de esta localidad y de Benifallim, María Fernanda Sanz y Carlos Barrachina respectivamente, el diputado socialista Jaume Pascual, los concejales de Compromís y PSPV del Ayuntamiento de Penàguila y las dos asociaciones que están siguiendo este asunto, Rentonar y Coordinadora d'Estudis Eòlics del Comtat. No asistió el alcalde de Penàguila, Carlos Blanes, quien en el pleno en el que se rechazó el proyecto se abstuvo por su relación profesional con Aguas de Valencia, empresa encargada de la gestión de depuradoras.
La conclusión de los asistentes es que el proyecto parece que ha quedado paralizado, pero que dado que no hay ningún documento que confirme la existencia de esta iniciativa, excepto la evidencia física de las prospecciones geotécnicas que se llevaron a cabo en el término municipal de Penàguila, se teme que pueda retomarse pasadas las elecciones municipales y autonómicas.
Es por ello por lo que se instó a los presentes y a la sociedad en general a mantenerse alerta sobre posibles movimientos futuros, que obligarían a la convocatoria de nuevas asambleas.
